¡¡¿¿Que qué??!!

Hace un tiempo, le hice un favor a un amigo. Como nada me costaba y sabiendo que llegaría el día en el que YO iba a necesitar de él, le dije

-"Con mucho gusto, haré todo lo que pueda para conseguirle un "date" con esa Srita. y Ud. me deberá un favor"-

Y en efecto, usé mis influencias para propiciar un encuentro entre mi amigo y la chica.

No pasó mucho tiempo para que yo necesitara de cobrarme . . . Resultó ser que mi amigo, es amigo de cierto lienzo, que es de mi particular interés y que por cosas del destino, se me escurrió hace algunos años. Pero como soñar es gratis, yo me dije a mi misma "Hoy es cuando!" y acudí a la deuda que tenía pendiente: Le pedí a mi amigo que averiguara el estado civil del ilustre caballero y que recaudara cualquier otro tipo de información, lo cual mi amigo hizo muy eficientemente. Me informó que el Señorito sigue soltero, es comerciante y muy bien querido en su comunidad. Claro, esa era la parte fácil. Luego venía el favor per sé: propiciar un encuentro entre mi objetivo y yo; lo cual no sucedió. Digamos que mi amigo hizo el intento . . . Pero no funcionó y ese fue el fin del favor.
Y eso no lo es malo de esta historia. Lo que realmente me destanteó, fue el efecto de rebote que tuvo en mi contra, pedir campañas. . .
Ahora resulta que mi amigo ha dispuesto creer que lo del favor, fue una farsa. Que en realidad yo me inventé un supuesto interés, en un "X", para provocar celos en él, dado que yo, al parecer de mi amigo, estoy enamorada de su persona.

¡¡Si serán vanidosos los hombres, por Dios!!! Para colmo de males, mi amigo, que cree que estoy loca por él, hizo su mejor esfuerzo por comerse el mandado y encima, facturar sus servicios en "especies". Como mi atención está invertida al 100% en mi objetivo inicial, los macabros planes de mi amigo, se vieron frustrados y ahora, ha optado por recurrir al "plan B" :

- El no corresponde a mi supuesto y secreto interés y ha cortado toda clase de comunicación conmigo, disque para no alimentar mis esperanzas . . .-

Ahora sí que me quedé sin el mico y sin la montera: Yo NO estoy enamorada de mi amigo, ya no tengo amigo, no hubo encuentro con mi susodicho en cuestión, ¡ni tengo quien me haga ese favor!.

¡Vaya suerte la mía!. ¡¡No vuelvo a hacer, ni a pedir esa clase de favores!!